El Indecopi, a través de la Dirección de Signos Distintivos, aclaró que la reciente entrega de la marca «Postres Cuchareables by Sienna», no otorga derechos exclusivos sobre la expresión «postres cuchareables».
Esto significa que cualquier persona o emprendedor puede seguir utilizando libremente y sin restricciones, la citada expresión o alguna similar que haga referencia a alguna característica de sus productos o servicios vinculados al sector gastronómico.
Hace unas semanas, emprendedores gastronómicos e influencers expresaron su preocupación a través de las redes sociales por la posible exclusividad de la palabra «cuchareable», tras la solicitud de esta marca ante el Indecopi. Ello, provocó polémica porque se creía que, con el registro de la marca, otros emprendedores no iban a poder usar la expresión «postres cuchareables» o “cuchareables” para referirse a productos o servicios brindados en el sector gastronómico.
Sin embargo, la resolución del Indecopi que otorga la marca «Postres Cuchareables by Sienna», aclara que la frase «postres cuchareables» hace referencia a una característica del producto, es decir, postres que se consumen con cuchara. Por tanto, cualquier emprendedor puede seguir utilizando esta expresión en su oferta de postres y otros productos y servicios gastronómicos, sin infringir la ley.
Con esta decisión, el Indecopi reafirma que sus resoluciones se emiten de acuerdo a la normativa vigente, asegurando un proceso transparente.
¿Qué son los Cuchareables?
De acuerdo con el Instituto Continental, “los cuchareables” son platillos servidos en recipientes, generalmente bowls de cartón o plástico, diseñados para ser consumidos con cuchara. La tendencia, que empezó en el sector de los postres con delicias como la mazamorra morada y el arroz con leche, ha evolucionado para incluir platos más elaborados como el ají de gallina, ceviche, y hasta el pollo a la brasa.
Agrega que la facilidad y comodidad de consumir estos platillos en un envase portátil ha atraído a un público joven y dinámico, que busca una experiencia gastronómica práctica y sabrosa.
Esta tendencia ha permitido a pequeños emprendedores y grandes cadenas de restaurantes expandir su oferta, adaptándose a las nuevas demandas del mercado. Platillos tradicionales están siendo reinventados en este formato, lo que no solo facilita su consumo, sino que también ofrece una nueva manera de experimentar la gastronomía peruana.